El cuerpo de la plaquita helicoidal de doble filo permite el mecanizado a profundidades mucho mayores que la longitud de la plaquita. Un singular conformador controla el flujo de viruta en sentidos radial y axial.
El filo posterior está inclinado en relación al filo frontal de manera que no tiene contacto con la superficie mecanizada cuando la herramienta penetra profundamente en la pieza.